Valentín López, responsable de Producción y Cereales de RAGT, destacó que la semilla es “clave” para llevar la campaña a buen puerto y advirtió de que “es necesario poner en valor las empresas que se dedican a la investigación sobre el cereal, a la mejora genética”. López mostró una serie histórica desde 1997 hasta 2014 en la que se podía comprobar la evolución de las producciones en España. A la luz de los grandes altibajos, destacó que es muy importante “tener claro que la actividad agraria no es fácil en España”. En ese sentido, la mejora genética “realiza una importante aportación al incremento de la producción agraria, ya que contribuye a resolver problemas concretos de la actividad, “lo que permite avanzar al conjunto del sector”. Así, destacó el ejemplo de la lucha contra las enfermedades y plagas, como la roya amarilla. “Hoy tiene nuestra compañía un número importante de variedades con gran tolerancia e incluso con resistencia casi total a este hongo”. Eso sí, subrayó que el trabajo para obtener una nueva variedad “es de casi de diez años; no estamos ante una actividad como la tecnológica, con un nuevo modelo en solo seis meses”.
Jesús Zúñiga, responsable de enfermedades en cultivos de INTIA, explicó las principales características para descubrir y atacar a hongos como la roya amarilla, una enfermedad emergente “que en el último año ha causado mucho daño en el campo”. Aunque en otras partes de España ya lleva años afectando a los cultivos, “en Castilla y León ha sido el 2014 cuando más se ha hecho patente”. Entre las genéricas que ofreció, recomendó vigilar con detenimiento un número de plantas “no inferior a 25” en diversas zonas de las parcelas, prestando especial atención a las tres últimas hojas. “En el caso de la roya amarilla hay que anticipar la vigilancia hasta uno o dos nudos. Siempre hay que mantener sanas las dos últimas hojas del cultivo por lo menos hasta que el grano esté en estado lechoso-pastoso”, apuntó. La jornada fue clausurada por Pedro Campal y por el presidente de la Diputación, Javier Iglesias, para quien la institución “va a estar siempre al lado del agricultor y ganadero de la provincia”. La primera edición de Salamaq recibió la visita de 120.000 personas, según la organización.