Aspropicyl ha celebrado recientemente una jornada técnica sobre poda, en la que han participado cerca de cien socios de la organización
Un buen manejo temprano del árbol del pistacho, cuando la planta tiene hasta cuatro años, es un buen comienzo si se desea una buena producción cuando alcance el estado adulto. Así quedó claro durante la jornada de poda celebrada recientemente por la Asociación de Productores de Pistacho de Castilla y León (Aspropicyl), que promueve el cultivo e investigar sobre su transformación y comercialización.
El árbol dará sus primeras producciones al quinto o sexto año y las máximas producciones se registrarán a partir del año número doce, aproximadamente, aunque todo ello dependerá del suelo, del manejo y de cuestiones como si se pone en secano o en regadío, como subraya Adrián Jiménez, agricultor y uno de los integrantes del colectivo.
Se trata de un cultivo “agradecido” y que no requiere excesivo trabajo para el profesional del campo, si bien su evolución en Castilla y León y en el conjunto de España dependerá de aspectos como el precio, “que ahora mismo es muy bueno”.
Para que esa evolución sea positiva está la labor de Aspropicyl, que pretende “aglutinar a los agricultores que apuestan por este cultivo, con el objetivo de conocerlo mejor”.
Una de las ventajas del árbol del pistacho es que se trata de un cultivo relativamente nuevo en Castilla y León, por lo que “no tiene severos problemas sanitarios en la actualidad”. Gracias a ello, el agricultor puede tomar con más tranquilidad la decisión de ponerlo en convencional o en ecológico, según Jiménez.
