Alberto Garrido, vicepresidente del Ceigram, ha participado en las III Jornadas de Transferencia en Cereales de Invierno, que continúan el jueves en Zamadueñas
El mundo necesita incrementar la producción de cereal en 800 millones de kilos de aquí a 2030, “lo que debe conseguirse no mediante el incremento de superficie cultivada, sino de los rendimientos; no se puede olvidar que en África se emplean cuatro kilos de fertilizantes por hectárea y año, frente a los 200 de la Unión Europea”. Así lo ha señalado el vicepresidente del Ceigram, el Centro de Estudios e Investigación para la Gestión de Riesgos Agrarios y Medioambientales, Alberto Garrido, durante las III Jornadas de Transferencia en Cereales de Invierno.
Las jornadas continúan el jueves en la finca Zamadueñas, de la Diputación de Valladolid. El programa se puede consultar aquí.
Garrido ha analizado la realidad del mercado mundial de cereales y ha adelantado que el mundo se encamina hacia un mayor consumo y comercio de cereales, con la expectativa de una mayor demanda, “consecuencia de una población mundial con más de 3.500 millones de personas con al menos cuatro dólares al día para consumir alimentos”.
En relación con los precios de cereal, Garrido ha advertido de que cabe predecir tendencias, “pero no es imposible predecir la volatilidad del mercado”. En relación con ello ha señalado que el almacenamiento público se ha revelado como no eficiente para regular los mercados y controlar los precios, y que se desconoce el origen de los comportamientos extremos que en ocasiones registran los precios.
El análisis debe tener en cuenta que trigo y maíz son bienes sustitutivos, es decir, tienen un destino común y compiten entre sí, “por lo que el precio de uno tiene efecto en el del otro”. Es esto es así, con la salvedad de que en EEUU parte del maíz se destina a bioetanol.
También ha señalado que en la Unión Europea, la PAC y los seguros agrarios “son fundamentales” para mantener la renta agraria. En el viejo continente, la evolución general irá hacia una mayor importancia de los seguros “y de una PAC que funcione como sistema contracíclico, vinculado a los precios, al estilo de lo que sucede en EEUU”.
