Los agricultores de Castilla y León presentaron para la campaña pasada más de 88.600 solicitudes únicas de ayudas a la Política Agrícola Común (PAC), que afectaban a 5,2 millones de hectáreas. La región fue la tercera comunidad autónoma en número de solicitudes, por detrás de Andalucía y Castilla La Mancha. Ahora son tiempos nuevos. La reforma de la PAC plantea retos al agricultor, tanto agronómicos como de gestión de ayudas y de documentación. Para estos últimos aspectos, el profesional del campo siempre encuentra asesoramiento y respaldo en las organizaciones agrarias, las entidades financieras y en algunas gestorías que conocen al dedillo las particularidades de la nueva normativa.
Las entidades financieras son una herramienta imprescindible para el agricultor. Las grandes firmas disponen de oficinas en muchas localidades de la región, a las que puede acudir tanto para obtener financiación como para cumplimentar trámites diversos. Este es el caso de las solicitudes de la PAC.
Bankia se sitúa como la segunda entidad de Castilla y León en número de domiciliaciones de la PAC, con cerca de diez mil expedientes, de los que alrededor de ocho mil son tramitados directamente en las oficinas.
La Caixa, por su parte, para la campaña contrata a 21 ingenieros agrícolas que ayudan al personal de las oficinas a tramitar las solicitudes en sus Centros PAC. El agricultor puede presentar su documentación tanto en las oficinas como en los autodenominados Centros PAC. La Caixa gestiona cerca de 7.000 peticiones.
Caja España- Duero lidera el mercado, con una cuota del 26%. Durante el último ejercicio tramitó 23.500 expedientes
egún los datos facilitados por la propia entidad. Con una red de más de 500 sucursales en Castilla y León, se trata de la mayor red de oficinas. “El vínculo entre Caja España- Duero y la región se mantiene y fortalece, ya como entidad filial del Grupo Unicaja Banco, que implica afrontar el futuro en condiciones de absoluta solvencia en el actual escenario financiero global”, recalcan.
Cajamar, una de las cajas de ahorro emblemáticas en la comunidad, tramita directamente 5.000 solicitudes. Además, a través de los acuerdos de colaboración con las organizaciones agrarias, suman otras 3.500 solicitudes. Su extenso entramado de oficinas, con más de 300 profesionales, está al servicio del agricultor castellanoleonés.
Algunas ventajas
Caja España, un año más, ofrecerá a los clientes que domicilien el cobro de las ayudas unas condiciones especiales
para anticipar automáticamente el cobro de las mismas. En Caja España también se verán “beneficiados por unos mejores precios a la hora de acceder a otro tipo de financiación necesaria para las necesidades de los agricultores y ganaderos, así como de una tarifa cero en comisiones”, según explican. Presta un servicio integral y asesoría individualizada, que tiene en cuenta las necesidades específicas de cada explotación. “Precisamente la experiencia y la profesionalidad de la plantilla suponen una baza fundamental que valoran los clientes a la hora de confiar la tramitación de las ayudas de la PAC”, indican.
En Bankia disponen de un amplio catálogo de productos que incluyen financiación del circulante y la inversión, seguros agrarios, medios de pago, anticipos de campaña, servicios de comercio exterior y otros. “Y todo ello sin necesidad de tramitar la PAC con nosotros”, recalcan. Domiciliando la PAC en Bankia “basta con sólo cumplir un requisito más, sobre siete alternativas que damos, para acceder al programa ‘Sin comisiones’”. Asimismo, es posible obtener el anticipo de la PAC a interés cero; lo que permite disponer, desde el momento de la solicitud, de liquidez para afrontar los gastos de campaña.
En Cajamar disponen de una amplia gama de productos encaminados tanto a financiar las necesidades de circulante del agricultor (anticipos de la PAC, créditos y préstamos campaña,
etc.), como a financiar también cualquier inversión que vaya a realizar en su explotación.
La Caixa, de la misma manera, ofrece a quienes solicitan la ayuda en su oficina anticipos PAC y, además, un regalo por confiar en la entidad para la tramitación del expediente para las ayudas.
Los expertos de la mayoría de estas entidades financieras de referencia en Castilla y León opinan que, en mayor o menor medida se producirá una reducción en el número de solicitudes que presentarán esta campaña. La aplicación del concepto de agricultor activo, la concentración de explotaciones (y por tanto, de expedientes) son algunas de las claves de este descenso.
Y la recomendación es unánime. Aunque confían en la capacidad y preparación de sus equipos profesionales, aconsejan al agricultor que no deje la presentación de la solicitud para los últimos días.
También en gestorías
Una buena opción para el profesional del campo es también la de recurrir a una asesoría especializada. Este
es el caso de Agroconsulting, integrada por un grupo de profesionales con mucha experiencia y conocimiento del sector. Los cambios que trae consigo la reforma de la PAC hacen necesario que el agricultor y ganadero sea especialmente cuidadoso con que la solicitud que cursa se atiene a todos los requerimientos que marca la normativa. De ello depende, en gran medida, a ayuda que percibirá. Agroconsulting concibe la explotación agrícola y ganadera en el concepto más actual de empresa. Ofrece también la tramitación de expedientes de incorporación, mejoras, asesoramiento fiscal, laboral y otros servicios.
Organizaciones agrarias, muy cerca del profesional
Las organizaciones profesionales agrarias son parte fundamental del sector. Su razón de ser fundamental consiste en velar por los intereses de los hombres y mujeres que tienen en el campo su medio de vida. Uno de los aspectos que más agradecen estos trabajadores es la ayuda y el asesoramiento que les prestan las opa con el papeleo. Asaja tramita en Castilla y León alrededor de 11.000 solicitudes, más que el resto de las organizaciones en conjunto. En UCCL calculan que rondan las 5.000. Tanto la Alianza (UPA y COAG) como Asaja ofrecen un servicio de asesoramiento integral a sus afiliados que no incluye costes adicionales para la presentación de la solicitud de ayudas de la PAC. Por su parte, UCCL presta este servicio sin coste para todo aquel que los solicite. Las organizaciones coinciden a la hora de señalar que la normativa es farragosa. “Resulta complicada incluso para la administración; hay modificaciones, y temas que no están cerrados todavía”, indica el portavoz de la Alianza Julio López. Por estas razones recomienda a los agricultores que acudan a su organización para conocer toda la información que necesita. “Hay que hacer las cosas bien porque luego vienen las inspecciones y acarrean la pérdida de rentas. Nos jugamos la PAC”, advierte. La duda casi existencial que ahora se plantea el profesional del campo es que “no sabe qué va a cobrar y, además, nadie se lo puede decir”, apuntan en Asaja. La informatización de las solicitudes permite que el solicitante apenas tenga que presentar papeles. “La documentación que se pide es extensa, pero los agricultores y ganaderos que hacen la PAC con nosotros están ya en nuestra base de datos, lo que simplifica la tramitación; se les envían borradores de la PAC anterior para que a partir de ahí se determinen los cambios para la siguiente”, señalan desde Asaja. “Está todo informatizado. Hay quien viene con un ‘excel’ muy bien preparado. Se suelen cargar los datos de otros años”, abunda David García, de UCCL. El experto aconseja al solicitante que extreme las precauciones al partir una parcela con distintos cultivos; que refleje la superficie exacta de cada uno. García también considera importante que el agricultor sepa de qué está sembrada cada finca -cada uno percibe una ayuda distinta-, y que se respete el número de cultivos y en su porcentaje.
