Respecto a la próxima campaña, se mantienen los datos de estimación de cosecha en la mayoría de las zonas.
En general, la campaña se caracterizará por un descenso de la producción de un 12% con respecto a la cosecha de la campaña pasada debido a las atípicas condiciones climatológicas durante el periodo de floración-cuajado (elevadas temperaturas hasta febrero, falta de precipitaciones y heladas con el fruto recién cuajado) que han afectado especialmente a Aragón y Comunidad Valenciana, donde se prevé una menor producción con respecto a lo estimado inicialmente en mayo.
Además, se observa una producción especialmente irregular en las zonas que arrastran problemas de sequía desde 2014 y problemas de Monilia que se han visto favorecidos por la climatología.