El sector ha reducido particularmente las emisiones procedentes de la gestión de estiércoles (-1,0%), gestión de suelos agrícolas (-3,2%) y maquinaria agroforestal y pesquera (-1,3%)
Unión de Uniones de Agricultores y Ganaderos, tras revisar el último Avance de Emisiones de Gases de Efecto Invernadero correspondientes al año 2019 del Ministerio de Transición Ecológica (Miteco), se congratula, en general, de la reducción del -6,2% de las emisiones brutas a nivel estatal respecto al año pasado y, en particular, de la reducción del 1,6% de las emisiones provenientes de la agricultura y la ganadería.
Unión de Uniones considera que estos datos, conocidos este miércoles muestran una vez más el compromiso del sector agrario por mitigar las devastadoras consecuencias del cambio climático y hacer más sostenibles sus sistemas productivos.
La organización resalta que los datos publicados por el Ministerio avalan la mejora en la eficiencia productiva de los sistemas ganaderos estatales que, a pesar de contar con un mayor número de animales respecto al año pasado y representar la mayor parte de las emisiones del sector (67,2%), han conseguido reducir sus emisiones por una mejor gestión del estiércol (-1,0%) y una mejora de las dietas en relación a la fermentación entérica (-0,1%).
Asimismo, en el ámbito de la agricultura, se ha conseguido reducir notablemente las emisiones procedentes de la gestión de suelos agrícolas (-3,2%), especialmente de las emisiones procedentes del N2O por un menor uso de fertilizantes inorgánicos y del CO2 por la mejora en el uso de la urea. También es reseñable el descenso de las emisiones procedentes de la maquinaria agroforestal y pesquera (-1,3%) debido al menor consumo de gasóleo B.
El sector primario tiene un margen más escaso para recortar sus emisiones
Unión de Uniones, no obstante, alerta de los objetivos poco realistas que se han establecido a nivel climático para el sector en el medio plazo, en concreto, en el marco del Plan Nacional Integrado de Energía y Clima (PNIEC) 2021-2030, que propone reducir el 12% para 2030 las emisiones del sector estatal respecto a 1990, encontrándose el sector actualmente en un 8,9% por encima de los niveles de emisión de ese año). “Tenemos que recordar que es la propia Comisión la que apunta en sus estudios que la agricultura y la ganadería tienen un margen más escaso que otras actividades para recortar sus emisiones por su vinculación a la producción de alimentos” aclaran desde la organización.
Por este motivo, contrastan los objetivos del Ejecutivo comunitario fijados en la Estrategia ‘De la Granja a la Mesa’ de reducir un 50% el uso de pesticidas químicos, un 50% los antimicrobianos en ganadería y un 20% el uso de fertilizantes. “En realidad, eso no es una propuesta… son supuestas metas” comentan, “para que fueran alcanzadas, deberían, en todo caso estar acompañadas de alternativas técnicas viables, medidas concretas y recursos suficientes que permitan mantener la productividad y la rentabilidad de las explotaciones”.
En este sentido, la organización reclama también la exigencia de niveles equivalentes de compromiso por parte de la UE a sus competidores en los mercados internacionales. “No es razonable intensificar los niveles de exigencia a la agricultura europea mientras que se avanza en los acuerdos Mercosur con países como Brasil en donde casi las tres cuartas partes de los fitosanitarios que se usan están prohibidos en la Unión Europea”, concluyen.
