La tercera cita con ‘Encuentros del Campo. El futuro de las empresas en el mundo rural’, organizada por la Sociedad Provincial de Desarrollo de Valladolid (Sodeva) y la Asociación Polígono San Cristóbal ha tenido lugar esta mañana en Medina de Rioseco. Los expertos participantes en las ponencias y en la mesa redonda posterior han coincidido en señalar la importancia que tiene para el desarrollo rural que haya relación “ágil” entre las empresas y las administraciones.
David Esteban, alcalde de Medina de Rioseco, en el inicio de la jornada ha destacado que el de hoy “es el tipo de encuentros que resumen lo que queremos para el futuro”. Ha dejado claro también que en el medio rural se necesita gente como la que ha asistido, gente emprendedora que genera actividad: que son puestos de trabajo. Ha destacado que la labor de las administraciones es la de solucionar los problemas de las personas, poniendo el foco, como ejemplo en la labor de Iberaval, que el año pasado avaló más de 4.000 proyectos empresariales.
Por su parte, David Quirce, de Iberaval, ha incidido en la singularidad del modelo que representa esta entidad semipública, cuyo capital es aportado por sus socios, que también se benefician de los créditos que avala el propio ente. Los técnicos visitan a los empresarios y exploran las posibles fórmulas existentes para apoyar sus proyectos. Iberaval ofrece al emprendedor ayuda para proyectos de hasta 750.000 euros y con plazos de devolución de entre tres y diez años.
Ana Isabel González, de la Diputación de Valladolid, ha recalcado que por todo el territorio de la provincia hay una red de agentes de desarrollo que ofrecen información sobre las ayudas que se ofrecen a los empresarios y emprendedores, no solo de la institución provincial como de otras administraciones, de modo que el interesado pueda acceder a todos los datos en una sola visita.
Destaca las ayudas del Plan Impulso para acceso al empleo y el autoempleo, con bonificaciones “a mayores” para jóvenes y mujeres como colectivos prioritarios. También ha añadido que las subvenciones de la Diputación son 100% compatibles con otro tipo de ayudas, como las que concede Iberaval.
Mesa redonda
Tras estas ponencias ha comenzado una mesa redonda bajo el lema ‘El futuro de las empresas en el medio rural’. En ella, Víctor Caramanzana, de Gasóleos Caramanzana, ha apuntado que Castilla y León está viviendo una segunda despoblación. “La primera fue del campo a la ciudad, pero ahora la gente se va de las ciudades de la comunidad a otras mayores, como Madrid”, ha dicho.
Asimismo, ha lamentado que la presión de la administración sea mayor en esta comunidad que en otras limítrofes, tanto en relación con los impuestos como en lo relativo a controles, lo que pone las cosas “muy cuesta arriba a empresas como la nuestra”.
En el mismo debate, David Urquizu, de la bodega Meóriga, adscrita a la DO León, ha recordado la evolución de esta antigua cooperativa de Mayorga en una sociedad limitada. Agradece la ayuda del grupo de acción local Adri Valladolid Norte, “que ha sido el mayor apoyo que hemos tenido”. También ha reivindicado su condición vallisoletana y ha reclamado un mayor respaldo por parte de las instituciones. Para él, el mayor problema es la dignificación del sector agrícola, “que la gente entienda que la uva sale del suelo y que trabajar en el campo es una opción atractiva”.
Para Felipe González, gerente de Cofocyl el medio rural es su modo de vida. Su compañía recoge forraje del entorno y le da valor gracias a la deshidratación, lo que le permite exportar a nueve países de Europa, el norte de África y Oriente Medio. Ha significado que exportar es una labor cara y costosa, que obliga a estar pendiente de las noticias internacionales, al mismo tiempo que ha agradecido la labor del grupo de acción local Adri Valladolid Norte, con una gran ayuda, y con un modo de trabajo muy ágil, “todo lo contrario que otras administraciones”.
Gustavo García, de Talleres Argasa, ha defendido que las empresas como la suya trabajen en el medio rural, y sobre todo que crean en ello para que el sector tenga futuro. Apuesta por la cualificación de los trabajadores, pero para conseguir personal con la formación adecuada “es imprescindible mejorar la imagen del sector”. Otra asignatura pendiente es la del acceso a internet, ya que “la tecnología es nuestra aliada, pero si falla la red nos estará poniendo la zancadilla”.
Ha clausurado el encuentro Antonio Rodríguez, presidente de la Asociación de Empresarios del Polígono de San Cristóbal, de Valladolid, quien ha recordado que todas las inquietudes expresadas en el encuentro se abordarán en el congreso que se celebrará en Fuensaldaña el próximo 29 de noviembre. Entre esas cuestiones ha destacado cinco: suelo industrial, infraestructuras, redes, nuevas tecnologías y formación a la carta para el empresario del medio rural.
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