Julio Gil Águeda e Hijos organizó durante la pasada FIMA un sorteo donde todos los visitantes y clientes de la firma pudieron participar para ganar un pulverizador Aneto de 1.200 litros. Tras la feria se ha hecho entrega del equipo al ganador del sorteo, que ha sido Pedro Jesús Millán Pascual, agricultor profesional de Noviercas (Soria) que, por esas casualidades de la fortuna, había pasado por el stand de GIL a ver su nueva gama de pulverizadores.
Como ya es tradicional, GIL organiza un sorteo para visitantes y clientes de su stand de FIMA y esta edición era casi obligado sortear un equipo de la nueva gama de pulverizadores que ha lanzado la empresa al mercado. Precisamente, Pedro Jesús Millán Pascual, agricultor profesional de Noviercas (Soria), cliente de GIL desde hace años, pasó por el stand para ver estos nuevos pulverizadores. Pero la suerte le eligió a él para que le tocara el pulverizador Aneto que sorteaba GIL: no se dio cuenta de que había un sorteo y fue su sobrino quién se lo dijo y le animó a participar.
Como es habitual, GIL ha hecho entrega del pulverizador al ganador en sus instalaciones de Daganzo (Madrid) y ha podido conocer mejor a este agricultor que es, además, cliente de la marca hace años. Pedro Jesús Millán Pascual trabaja unas 550 hectáreas de terreno en la provincia de Soria y para realizar todas las labores cuenta con dos tractores, uno de 180 CV y otro de 255 CV, además tiene cosechadora propia y varias sembradoras.
Desde los años 90 es cliente de GIL, cuando compró una sembradora de girasol y hace unos 10 años adquirió una sembradora de siembra directa AIRSEM 6034-D. Para este agricultor profesional, GIL es una marca que responde: “Tanto la primera sembradora como la AIRSEM son equipos que destacan por su fortaleza y precisión y, realmente, desde que los compré estoy encantado porque han superado todas las expectativas que tenia en ese momento. Desde luego en nuestra zona GIL es una marca con muy buena imagen al ser muy competitiva, con una excelente relación calidad/precio”.
Pedro Jesús Millán Pascual se mostró muy satisfecho por el premio ya que realmente lo necesita. Para este agricultor los nuevos pulverizadores de GIL “me gustan realmente por la fortaleza de las barras de aluminio y el diseño del equipo en general y creo que con un equipo así igual puedo trabajar para terceros”.
Este agricultor profesional, que ya en 2001 le puso el GPS al tractor, lo tiene claro de cara al futuro: “La rentabilidad en el campo pasa por aumentar el tamaño de las explotaciones y reducir los costes, algo que va implícito en la optimización del tamaño de la maquinaria y de su calidad”. Para GIL, entregar premios a un agricultor así es también una suerte.
