En su desarrollo han participado investigadores del grupo de Hidroinformática y Gestión del Agua de la Universidad Politécnica de Madrid, el Observatorio del Ebro (URL-CSIC) y la Universidad de Barcelona (UB).
Según explica Carme Llasat, directora del Grupo de Análisis de Situaciones Meteorológicas Adversas de la Universidad de Barcelona: “Cuando tiene lugar un fenómeno de este tipo, no disponemos de la información de cada lugar y no podemos hacer un mapeo completo de los efectos. Si con esta aplicación conseguimos información de todas las zonas afectadas, podremos analizar mejor los fenómenos y sus impactos. Además, las fotografías de inundaciones pasadas o de sus efectos nos permiten reconstruir esos episodios”.
Tanto en la propia aplicación como en la web del proyecto, se pueden visualizar en un mapa las imágenes compartidas por los usuarios clasificadas por colores según su contenido: inundación, lluvia, granizo, rayos, desprendimientos… así como imágenes de zonas vulnerables en caso de inundación, como por ejemplo una construcción en medio de un arroyo o una alcantarilla en mal estado. Esta información puede incluso servir para aumentar la seguridad de las personas ya que nos puede ayudar a denunciar malas prácticas.