Con esta importante inversión, la bodega busca fomentar la sostenibilidad de la empresa y favorecer la participación de los viticultores y elaboradores en la cadena de valor
El delegado territorial de la Junta, Guillermo García, ha visitado esta mañana en Gordoncillo (León) las instalaciones de Bodegas Gordonzello, que cuenta actualmente con unas instalaciones modernas e innovadoras y con más de 200 hectáreas de viñedo colocado en espaldera media.
Gordonzello, que se encuentra dentro de la Denominación de Origen Tierra de León, ha dado un paso más y va a acometer próximamente un proceso de ampliación y mejora de sus instalaciones, con una inversión prevista que supera los 870.000 euros, con la que espera un incremento tanto en producción como en ventas.
Para 2019, esta bodega tiene prevista la construcción de una nave adosada a la edificación principal de más de 1.700 m2, que se distribuirá en tres zonas diferenciadas, una comercial, otra de elaboración y embotellado y una tercera destinada a la logística. En cuanto a la maquinaria y bienes de equipo, se adquirirán una nueva línea de envasado automatizada, una llenadora de envases PET, jaulones, mobiliario para tienda y sala de catas, así como equipos de laboratorio.
En la visita del delegado territorial, al que ha acompañado el jefe del Servicio Territorial de Agricultura y Ganadería, Fidentino Reyero, han estado presentes el director gerente de Gordonzello, Jose Manuel Fernández, y el presidente de la DO Tierra de León, Rafael Blanco.
A través de esta importante inyección de dinero, Gordonzello busca fomentar la sostenibilidad de la empresa y los procesos sostenibles, favorecer la participación de los viticultores y elaboradores en la cadena de valor e innovar en la implantación de nuevos productos y presentaciones.
Para ello, Gordonzello ha presentado solicitud de ayudas para acometer su proyecto inversor ante la Consejería de Agricultura y Ganadería de la Junta de Castilla y León dentro del programa de apoyo al sector vitivinícola español 2019-2023 regulado por el R.D. 5/2018, pudiendo obtener una subvención de hasta el 40% del total de la inversión prevista.
El inicio de todo
Esta bodega surge en el año 1995, fruto de la inquietud de los habitantes de la localidad leonesa de Gordoncillo, con gran tradición vitivinícola y con gran motivación para continuar con la elaboración de vinos contando con un gran producto como es la variedad Prieto Picudo.
El resultado de la apuesta inicial de los 101 socios fundadores se materializó en una Sociedad Anónima con 305 hectáreas de terreno sobre las cuales se realizarían las nuevas plantaciones de viñedo y la futura bodega donde se llevaría a cabo la transformación de la materia prima y posterior comercialización del producto final.
Como recuerdan desde la Junta de Castilla y León, en sus inicios fue determinante el apoyo económico y funcional de la Consejería de Agricultura que, por un lado, desarrolló la concentración parcelaria que posibilitó la agrupación de las parcelas aportadas por los socios en nuevas fincas de gran tamaño susceptibles de mecanización con un único propietario; y por otro lado, financió y ejecutó como obra de mejora de la concentración la totalidad de la plantación a lo largo de los años 1996 al 1998 de 205 hectáreas de viñedo. El total de la inversión superó la cuantía de 1,3 millones de euros que se materializó en una subvención a fondo perdido por parte de la Junta y en un préstamo a largo plazo y bajo interés.
Tras la puesta en producción de la plantación se planteó la construcción de la bodega, para lo que fue necesario un nuevo impulso económico que en este caso se basó en los socios fundadores, en nuevos socios incorporados al proyecto, en el apoyo de entidades financieras y de nuevo en la Junta de Castilla y León a través de las sucesivas convocatoria de ayudas para las pymes del sector.
Gordonzello es la mayor empresa en cuanto a superficie de viñedo y a número de botellas certificadas vendidas. La DO aglutina 40 bodegas que transforman la uva de las 1.400 hectáreas inscritas y trabajadas por 280 viticultores. A pesar de la temporada de heladas de esta primavera, el proceso de recuperación de las viñas está dando buenos resultados y se prevé que este año se puedan recoger 2,5 millones de kilos de uva.
