La Denominación de Origen Toro ha concluido 2018 con un aumento de las ventas del 3,5%, lo que supone 13.722.500 botellas, con lo que ha vuelto a marcar un nuevo récord. Los buenos resultados se han registrado en toda la gama comercializada con este marchamo, que ampara producciones zamoranas y vallisoletanas.
A lo largo de 2018 ha vendido 12.045.000 botellas de tinto joven y joven roble, con un aumento del 2,4%.
También se han comercializado 470.000 botellas de blanco y 370.000 de rosado.
Los reserva y gran reserva han superado las ventas del año anterior, con lo que han pasado de 305.000 botellas en 2017 a 325.000 botellas en 2018.
Asimismo, el año recién concluido ha vendido 1.452.500 botellas de tintos crianza, lo que supone un incremento del 21%.