La Asociación de la Industria Alimentaria de Castilla y León, Vitartis, pone en marcha el proyecto ‘Retina’ (Reto demográfico y atracción de talento: acciones para superar dos desafíos de la industria alimentaria de Castilla y León). Su objetivo es dotar de las herramientas adecuadas a las empresas agroalimentarias para poder conocer las preferencias de sus profesionales, optimizar la gestión de recursos humanos y afrontar ‘científicamente’ la fidelización y atracción de talento.
El presidente de Vitartis, Pedro Ruiz ha informado sobre el proyecto ‘Retina’, pionero en España, en la sesión celebrada por la Junta Directiva de la Asociación, que se ha reunido hoy en las dependencias del Grupo Lince en Valladolid.
La mejor gestión del talento y su impacto en la competitividad de las empresas permitirán elevar aún más la contribución del sector al mantenimiento de la población, especialmente en el medio rural, donde se asientan la mayor parte de las industrias agroalimentarias de Castilla y León. Según una encuesta interna de Vitartis, casi la mitad de sus socios tienen su sede en localidades de menos de 5.000 habitantes y emplean a más de 3.150 personas.
“Es precisamente el dinamismo y la estructura capilar de nuestro sector lo que le han convertido en estratégico para la economía regional y decisivo para afrontar el reto demográfico de Castilla y León”, afirmó el presidente de Vitartis.
Una solución tecnológica muy innovadora
En palabras de Pedro Ruiz, el proyecto ‘Retina’ es una “solución tecnológica muy innovadora que nos va a permitir acercarnos científicamente a un capítulo, como es la gestión del talento, que siempre nos ha preocupado mucho, pero que hasta ahora hemos gestionado casi por intuición”.
La iniciativa, que se desarrollará con la colaboración de Dathum, “nos permitirá conocer qué es lo que realmente motiva a las personas que trabajan en nuestras empresas y qué diferencias hay entre sus expectativas y la realidad que viven”.
Es la primera vez, añadió, que se enfoca un estudio de estas características desde la visión de los profesionales que trabajan en las empresas de un sector concreto y en un ámbito geográfico determinado.
Pedro Ruiz se mostró muy esperanzado en los resultados de este proyecto, que habrá concluido previsiblemente a finales de este año, porque “vamos a disponer de una solución tecnológica, basada en inteligencia artificial, que nos ayudará a conocer cuáles son ahora las preferencias de nuestros profesionales, de manera que podamos disponer de toda una batería de acciones y recomendaciones prácticas para tomar las mejores decisiones a corto, medio y largo plazo”.
El proyecto ‘Retina’ cuenta con el apoyo de una ayuda directa de la Consejería de Economía y Hacienda de la Junta de Castilla y León para ‘Actuaciones singulares’.
Más empresas exportadoras y más ventas en el exterior
El presidente de Vitartis expresó su satisfacción por el dinamismo del sector agroalimentario de Castilla y León en el exterior, cuyas ventas han superado por primera vez los 3.000 millones de euros, según el informe del Icex correspondiente al ejercicio 2022.
“Contamos con más empresas exportadoras y más volumen de ventas”, dijo Pedro Ruiz. Después de un crecimiento constante durante los últimos seis años, las exportaciones del sector alcanzaron en 2022 los 3.063 millones de euros, un 13,4% más que en 2021, ejercicio en que también aumentaron casi un 11%.
El presidente de Vitartis, que calificó a la industria agroalimentaria de España como “una de las potencias exportadoras de Europa”, quiso poner en valor dos datos que confirman el dinamismo del sector regional en este capítulo.
Por un lado, recordó que en 2022 aumentaron un 3,7% las empresas agroalimentarias de Castilla y León con actividad en el exterior frente al descenso de la media nacional del sector (-2,3%). Y por otro, que el volumen total de ventas de las empresas de la Comunidad se ha incrementado en casi un punto por encima de la media nacional (12,6%).
En todo caso, también reconoció que la actividad del sector agroalimentario regional en el exterior tiene un amplio margen de mejora por delante, sobre todo en lo que se refiere a las cuantías de las ventas. Según los datos de 2022, más del 56% de las empresas exportadoras realizaron unas ventas totales inferiores a los 50.000 euros.
