Según las observaciones realizadas, en los próximos días se podrán superar los 34 grados en la meseta de Castilla y León y los 36ºC en zonas del Sur de la Comunidad. Además, a partir del sábado, la probabilidad de tormentas es muy alta en todas las provincias.
Se espera que el martes día 14 de junio el episodio de altas temperaturas comience a remitir, y será a mediados de la próxima semana cuando la situación se normalice.
La alerta se declara desde las 12:00 horas de este jueves, día 9 de junio, y se mantendrá hasta la que situación se normalice.
Como consecuencia de ello, la Agencia de Protección Civil y Emergencias proporciona una serie de recomendaciones a la población para prevenir posibles emergencias derivadas de este episodio de calor.
Entre ellas, evitar las actividades al aire libre en las horas centrales del día -entre las doce de la mañana y las seis de la tarde- así como prestar atención a la población de riesgo, que incluye personas mayores, pacientes con enfermedades crónicas (como pueden ser hipertensión, diabetes, cardiopatías…) y menores de cinco años.
La exposición prolongada al sol puede traer consigo la aparición de un golpe de calor, cuyos síntomas suelen ser dolor de cabeza y mareos, náuseas y vómitos, temperatura corporal elevada -incluso por encima de 40 grados- con ausencia de sudoración, calentamiento de la piel, desorientación…
Además se hace un llamamiento a la población para que, en el periodo de vigencia de esta alerta, se extreme la precaución en el uso del fuego al aire libre para evitar que se declare un incendio.