Las dos empresas a las que el productor remolachero de Castilla y León puede entregar la raíz -Azucarera y ACOR-, además controlar e impulsar las siembras, hacen todo lo posible estos días para hacerle más atractivo el cultivo al agricultor, siempre que se alíe con una u otra. Que el precio mundial del azúcar repunte hace que el panorama sea mejor.
Los contratos de integración de Azucarera mediante los que alcanza acuerdos con los agricultores para cultivar la raíz de forma conjunta. Con esta fórmula comparten riesgos la empresa y el agricultor. Así, además, Azucarera financia parte de los inputs que el agricultor necesita para desarrollar su actividad, como la semilla y el fertilizante.
Azucarera también va a ofrecer a los remolacheros la posibilidad de aplicar un descuento fijo de corona, tierras y piedras en cada una de las entregas de remolacha.
El descuento fijo que ofrece por agricultor será la media ponderadas de su descuento individual en los últimos tres años haya tenido cultivo con Azucarera, hasta cinco campañas anteriores. Este valor del descuento final se aplicará sin decimales.
En el caso de que el remolachero, en los últimos cinco años, hubiera estado menos de tres campañas sin sembrar con Azucarera, se le ofrecerá la posibilidad de aplicarle un descuento fijo, a calcular en función de las características de su explotación y de la media obtenida por agricultores con explotaciones similares.
Para acogerse a esta opción, el agricultor deberá estar adherido a un módulo o agrupación de entregas cuya recolección y carga de remolacha esté gestionada por Azucarera. Quienes que se acojan a esta modalidad deberán entregar la remolacha sin descoronar.
Por su parte, ACOR, que ya ha iniciado el periodo de contratación por medios telemáticos debido a la crisis del coronavirus, gracias al acuerdo alcanzado con las organizaciones agrarias garantiza que el socio recibirá como mínimo 42 euros por tonelada.
Además, el socio de esta cooperativa sumará “un posible retorno cooperativo por la buena evolución del mercado del azúcar”. El precio ha subido en el mercado mundial y europeo, según los últimos informes de la Comisión Europea. Donde más, en la región 3 de la UE (donde está España), hasta los 445 euros por tonelada, 78 euros más que hace un año (un 22%).
