El riego es un aspecto fundamental en el cultivo de la vid a escala mundial, y quizá con más motivo debe serlo en Castilla y León, dadas sus condiciones de suelo y clima. El investigador de Itacyl Jesús Yuste Bombín acude a Agrotecnológica con la misma convicción que tenía cuando inició su carrera profesional: el factor más limitante para el cultivo de la vid es la disponibilidad de agua para su crecimiento, y también para su producción.
Por ello, “la cuantificación de las necesidades de riego a través de diferentes indicadores es crucial para adoptar los criterios de aplicación de riego”. En el ámbito de la investigación “se trata de medir esas necesidades, pero con especial atención a sus efectos sobre la composición del fruto, es decir, sobre la calidad de la uva, que repercutirá en la calidad del vino”, subraya.
Como señala el estudioso, “existen diversas herramientas para facilitar la interpretación de esas necesidades y el avance de la tecnología nos beneficiará para una aplicación con un criterio más científico, pero también más práctico en cuanto a la consecución de los objetivos de cantidad y calidad que tiene cualquier explotación de viñedo”.
Relación con el mundo de la empresa
Como subraya Yuste, Itacyl afronta proyectos de investigación y trata de generar información que puede ser utilizada por parte de las empresas del sector. De hecho, “en los últimos años hay una tendencia más acentuada hacia el desarrollo de trabajos de investigación de forma común. Ello hacia diferentes aspectos, uno de ellos es el riego”, destaca.
